Mashol de pie y se ve un fondo marino

Mashol Rosero

Mi cuerpo-mente se siente completo en el cerro. Descubro que soy andina cuando algo en mi alma se abre al volver a las montañas en las que crecí. Podrá sonar un cliché, pero bailo desde que me acuerdo, y me cuentan que bailaba antes de lo que puedo recordar. Una canción sonando era todo lo que necesitaba, así fuese en la calle o en medio de un centro comercial. Me gustaba moverme, disfrutar, ser. Ahora, me encanta, y puede ser una canción lo que me motive; o un silencio; o una sonrisa; o …, pero sin duda los motores más fuertes son el conectar y compartir, conmigo, contigo, con el resto, con el universo. La improvisación siempre estuvo ahí como una base de mis ganas de bailar. Amo improvisar, dejarme atravesar y resonar en el presente. Cuando de niña me preguntaban qué quería ser respondía: profesora de danza. Parece que la tenía clara sin querer queriendo.

error: Contenido protegido